Ya se ha hablado en este blog de Ochún Ibú Kolé o Ikolé , la versión más hechicera de Ochún , la bruja que puede transformarse en pájaro y volar, o impartir justicia y orden en el mundo. Pero hoy quiero presentarte esa parte de Ikolé dedicada a sus hijos, aquellos que tienen el aché (el poder mágico) en su sangre para destruir o construir simplemente soplando polvo en el aire. Sí, sólo ellos pueden hacerlo con facilidad, pero desgraciadamente no todos están debidamente preparados por sus padrinos o madrinas. ¿Por qué? No todo el mundo conoce a Ochún , una diosa misteriosa, y no todo el mundo sabe cómo hacer funcionar su magia o involucrarla en los asuntos humanos. Ikolé no es el "Aura Tiñosa" en el sentido estricto de la palabra, pero está emparentada con este tipo de buitres porque cuando adopta los rasgos de un ave vuela tan alto que no se le ve la cara. Se decía que tenía el poder de volar tan alto que podía ver el mundo entero desde su altura. De hecho, cuando
La Charada Cubana y los Orichas de la Santeria Afrocubana. La cubanía en todo su esplendor